Es invierno, hace frío y ahora que está de actualidad el caldo con pelotas murciano me apeteció un reconfortante plato de albóndigas en caldo como las que prepara mi madre.
Ingredientes:
200 gramos de carne picada (cerdo y ternera)
2 huevos
50 gramos de jamón serrano
Un ajo
Un puñado de perejil
6 cucharadas de pan rallado
Un hueso blanco
Azafrán
Laurel
Aceite de oliva virgen extra
Vinagre
Sal
Lo primero que hice fue machacar en un mortero el ajo y el perejil y mezclarlos bien en una fuente con la carne, el jamón, los huevos y el pan rallado. Salpimenté y fui haciendo bolitas del tamaño de una nuez.
Para que la carne no se pegue en las manos, un truco es mojarte los dedos en vinagre. Cuando tuve hechas las albóndigas, las freí en tandas en abundante aceite de oliva bien caliente.
Una vez fritas, las coloqué en una olla y las puse a cocer en 350 ml de agua a la que añadí dos hojas de laurel, un hueso blanco y unas hebras de azafrán. Estuvieron a fuego muy suave durante quince minutos y listas.
Aunque en esta ocasión no lo hice, otras veces las he servido con un aliño preparado con una yema de huevo cruda y una cucharada de vinagre bien mezcladas que añado al caldo ya en el plato.
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